Friday, August 16, 2013

Elysium, de Neil Blomkamp



Basta ya de cámara en mano. Basta ya de peleas que no se entienden. 
Si teneis un diseño de producción acojonante, mostradlo bien, que luzca. 
Los robots, las armaduras, las naves, las armas, todo en Elysium, se muestra como de pasada, borroso, por el movimiento de la cámara.
Y si ya no podemos disfrutar de eso, entonces debemos centrarnos en lo que pasa. Y en Elysium no pasa nada que no sepamos de antemano. Todo está visto y recontravisto. Previsible en cada segundo de la película.
Pues ya que la historia no tiene nada del otro mundo (ja, ja, qué irónico, del otro mundo, hablando de Elysium), al menos empaticemos con sus protagonistas.
Y tampoco. Porque me dan igual. Porque son planos. Porque no me importa lo que les pase, ni sufro con ellos. Ni el Bourne con los hierros de Forest Gump, ni la chica, ni la niña, ni nadie. Jodie Foster pasaba por ahí y Sharlton Copley hace lo que puede con su personaje para salvar los muebles.
Es más, me molesta ver que intentan crear una cierta épica y ésta no despega. Estaba fuera de la película, frunciendo el ceño, preguntándome por qué, si lo tenía todo para gustarme, me ha parecido un film del montón.
Ah, y la resolución es tan simple que da hasta cosica. Si la piensas dos veces, ves que en realidad esa solución no es solución a nada.
Lástima.